La enseñanza en A Illa de Arousa

Hoy en día vemos la enseñanza como algo natural, que nuestros hijos vayan a la escuela no se cuenta como un privilegio sino como una obligación. Pero debemos darnos cuenta de que realmente esto no fue así siempre, sino que la educación escolar para muchos fue imposible, y que el inicio del desarrollo en las aulas se convirtió en un privilegio para algunos pocos. Este es el caso de la enseñanza en A Illa de Arousa.

Los inicios de la enseñanza en A Illa de Arousa

Si bien la escolarización llegaba a la isla por la mitad del siglo XIX, cuando pertenecía al ayuntamiento de Vilanova de Arousa, la situación geográfica y el gran volumen de niños en las aulas generó un conflicto que dio como resultado que Manuel Lugín se convirtiese en el primer maestro de A Illa de Arousa. Este fue un gran acontecimiento y una bocanada de aire para los arousanos, que vieron en el la posibilidad de tener al alcance el recibir una formación digna como el resto de niños de la zona.

Y es que tenemos que tener en cuenta que hasta no hace mucho el puente no existía, por lo que el traslado de un lado a otro tenía que realizarse teniendo en cuenta factores como el viento y el viento, eso sin tener en cuenta el factor económico, que pesaba más que cualquiera. Ya en el año 1888 se inaugura la primera escuela elemental incompleta para niñas, siendo encabezada por Adelaida Iglesias.

Mejorando la enseñanza

A medida que el municipio arousano desarrollaba una economía también abría las puertas a que la enseñanza en A Illa de Arousa fuese de mayor calidad. En el año 1964 se inaugura el edificio para el Grupo Escolar, reuniendo en él las escuelas que existían en el lugar, que son: la Escuela Unitaria y de Orientación Marítima y Pesquera, enfocada para los niños; la Escuela Unitaria dirigida a las niñas; y la Escuela Mixta de O Campo. Del mismo modo, se tomó la decisión, viendo la demanda existente debido a la inserción laboral de las mujeres en las conserveras y de los hombres en el mar, de crear una unidad de parvulario para que los más pequeños tuviesen la atención necesaria durante las jornadas de trabajo de sus padres.

De este modo se aseguraba la enseñanza en A Illa de Arousa para los más pequeños, aunque el problema de la formación seguía existiendo, puesto que a falta de la unión mediante un puente con la península, los chicos veían como sus aspiraciones se encontraban con trabas que pocos podías superar. Los costes por realizar el trayecto diariamente era elevado y la climatología jugaba un rol muy importante.

Durante los años 1972 y 1976 el centro vivió una ampliación, hasta que ya en el año 2000 se dio paso a la construcción de las actuales instalaciones siendo derrumbadas las que en su día fueron la imagen del progreso, la educación y el derecho de un pueblo por recibir una enseñanza digna.

El puente, una puerta a la enseñanza en A Illa de Arousa

La inauguración del puente en el año 1985 abrió las puertas de la enseñanza superior a todos los habitantes de la isla. Así, hoy en día podemos hablar con vecinos que son médicos, abogados o profesores, personas que tuvieron la oportunidad de obtener unos conocimientos y que su capacidad intelectual no quedó desaprovechada por los impedimentos socio-económicos.

Este desarrollo se vio plasmado en la creación e inauguración en el año 1992 del Instituto Galego de Formación e Acuicultura (IGAFA), siendo el único de todo Galicia que imparte formación profesional de acuicultura y buceo.

Quizás deberíamos hacer ver a nuestros hijos la situación que hasta no hace mucho se vivía con respecto a la enseñanza en A Illa de Arousa, de modo que puedan apreciar la oportunidad que tienen a su alcance. Porque la enseñanza no es un privilegio sino un derecho, desde aquí queremos hacer mención a todos aquellos que hicieron posible el desarrollo cultural de un pueblo, los maestros.

SONRISAS Y LÁGRIMAS

La escuela infantil Sonrisas y Lágrimas es el centro de enseñanza de A Illa de Arousa más reconocido en todo la Comarca. Hoy en día son muchos los padres de otros ayuntamientos vecinos que deciden llevar a sus hijos a esta escuela. Es una situación un tanto anecdótica, puesto que si hace ellos eran los isleños quienes necesitaban salir del municipio para recibir una mejor educación, hoy en día son otros los que traen a sus hijos a la isla por el prestigio que tiene el centro en el lugar en sus primeros pasos en el mundo de la enseñanza y la educación.

Sor Aurora

Hablar de Sonrisas y Lágrimas es hablar de Sor Aurora, una figura muy importante para el pueblo arousano. Llego al pueblo arousano cuando este aún pertenecía a Vilanova de Arousa, en la década de los 70, y fue para quedarse.

Sor Aurora, junto a sus hermanas de congregación, instauro la Compañía de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, denominado Sonrisas y Lágrimas, debido a la preocupación que tuvieron al llegar a la isla y ver las necesidades que un gran número de niños y niñas no escolarizados tenían.

Aunque en un principio su destino era el Colegio Público de la localidad, al descubrir estas carencias en los más pequeños deciden reacción y alquilar locales en distintas zonas y así impartir talleres, educación y enseñanza en A Illa de Arousa.

El centro, una necesidad para el pueblo

Tras exponer a los Superiores Provinciales la necesidad de un centro integro para atender a los niños, ya que debido al desarrollo económico eran muchos los que necesitaban de una guardería. Y así se consiguió lo que hoy en día en el Centro Sonrisas y Lágrimas, inaugurado en el año 1977 y que cuenta con 10 unidades, 4 unidades del 1º ciclo y 6 unidades del 2º Ciclo de Educación Infantil, destinando este centro a los niños de entre O a 6 años.

Las bases de este centro están basadas en una pedagogía abierta, flexible y constructiva, siempre teniendo en cuenta las necesidades de los alumnos y alumnas.

Tras conseguir su objetivo primordial, que fue ayudar a todos los niños de A Illa de Arousa a tener una educación digna y volcar su vida en ello, Sor Aurora entro en los corazones de todos los vecinos de la localidad, estando presente incluso después de su fallecimiento, el 29 de octubre del año 2002. Prueba de ello es la estatua de bronce a tamaño real de la imagen de Sor Aurora situada en la puerta de la iglesia de San Xulián, parroquia del municipio.

Fotografías del libro “A Illa de Arousa, un percorrido no tempo”, Deputación de Pontevedra, Editorial.